Desapariciones y feminicidio en Ilamatlán y Huayacocotla; y en la Fiscalía todo sereno.
Ya está circulando la ficha de búsqueda de Yulissa Itzel Tolentino Rosales, reportada como desaparecida por la Comisión Estatal de Búsqueda de Veracruz.
Yulissa desapareció el pasado 3 de julio de la cabecera municipal de Ilamatlán, Veracruz. Tiene 17 años.
Además, desde febrero de este año está reportada la desaparición de Areli Sánchez Mérida, de apenas 15 años de edad, de la comunidad de Viborillas, municipio de Huayacocotla. En ambos casos, la fiscalía le dijo a las familias que “va a investigar”.
Otro caso es el de Jesús Ramón Mayorga Hernández, también de Huayacocotla y desaparecido desde hace varias semanas.
Por si no fuera suficiente, el 20 de junio pasado, en este mismo municipio, fue asesinada Maura Fernández Cruz con claros indicios de feminicidio, aunque no fue catalaogado de esa manera sin importar que Veracruz tiene dos Alertas de Violencia De Género.
Dichas alertas obligan a que todos los asesinatos de mujeres sean considerados como feminicidios para su investigación. No ocurrió así con el caso de Maura.
Este es el recuento del terror en Huayacocotla e Ilamatlán. Desapariciones de menores de edad y un feminicidio reciente. Pero parece que no está pasando nada.
¿Por qué normalizamos esta violencia? ¿Por qué no estamos afuera de la Fiscalía de Huayacocotla exigiendo que se hagan las investigaciones necesarias y que haya pronta respuesta?.
¿Por qué no hay una brigada de búsqueda estatal en esta región, dado el número de personas desaparecidas en apenas dos municipios?.
¿En dónde está Yulissa Itzel?, ¿en dónde está Areli?, ¿en dónde está Jesús Ramón?, ¿por qué no se catalogó como feminicidio el caso de Maura?.
Es a la Fiscalía de Huayacocotla y a las autoridades de este municipio a las que les toca responder. La exigencia es a que lo hagan pronto.
