Radio Huayacocotla, La Voz Campesina, nació en cambio de época, casi al mismo tiempo que el alunizaje del Apolo 11, el 16 de julio de 1969. Entre las utopías de la época apareció el luminoso deseo de la comunicación popular; pero en México la radio comercial se apoderó desde el principio del espectro, convirtió las oficinas de la Secretaria de Comunicaciones en propiedad privada y al país en uno de los más atrasados en experiencias de radio educativa y comunitaria.
En el vasto territorio mexicano, durante los años 70 y 80, solamente Radio Huayacocotla y Radio Teocelo habían logrado precarios permisos de radiodifusión en Onda Corta y AM respectivamente. Por eso Radio Huaya pertenece desde sus inicios a la Asociación Latinoamericana de Educación y Comunicación Popular (ALER), mediante la cual armoniza a nivel continental.
Treinta años de transmisión paciente, adaptando los aparatos receptores de muchas familias serranas para que pudieran sintonizar la radio con esos extraños ruidos de la onda corta; treinta años de lucha conjunta exigiendo el derecho a la libre comunicación, hasta que en 2005 llegó la licencia para transmitir en el 105.5 de FM, en el marco de la movilización de los pueblos indígenas reclamando frecuencias para radios comunitarias. El gobierno mexicano hubo de ceder 27 permisos, por primera vez en 40 años.
En 2019, tras el primer estudio profesional para la medición de audiencias radiofónicas realizado en 65 municipios de la sierra y las huasteca, Radio Huaya apareció en la preferencia del 30 % de la población, cerca de 600 mil personas más la audiencia por internet vía Streaming a todo el mundo.