La organización de Texcatepec ha servido para exigir lo que el pueblo necesita, y para que el que manda obedezca.
Este miércoles se reunieron miembros de las organizaciones de Texcatepec, Veracruz, para analizar este tiempo de pandemia que atravesamos y para pensar los problemas de la organización.
Porque es una temporada que aprovechan las autoridades para tomar decisiones y hacer obras sin consultar a la gente, con el pretexto del Covid y de la sana distancia. Las quejas han subido desde Chila Enríquez y El Sótano, hasta la Voz Campesina.
Con mucho cuidado se reunieron delegados y delegadas de las organizaciones para informar del crecimiento de las milpas y de las celebraciones de costumbre del elote que ya vienen.
Las organizaciones cumple ya 36 años, desde que la gente de Texcatepec empezó a juntarse para defenderse de la violencia de los caciques, que mataban a las persoans y robaban vacas por rebaños. También para luchar para que el pueblo mande.
Floriberto San Juan, otomí de la comunidad de El Tomate, nos informa, al terminar la reunión, de las finalidades de la organización, independiente de partidos y gobiernos.
Cuando la gente se junta con independencia, todas las preocupaciones caben, para que nadie camine solo, para que la comunidad se haga fuerte y todas las voces se escuchen.
Esa es la misión de las Organizaciones Unión Campesina Zapatista y Comité de Defensa Campesina de Texcatepec.
