Migrantes sufren maltrato laboral en cultivos de Colima
La migración es frecuente en nuestro país. Cada vez son más los jóvenes y adultos de nuestras comunidades que por falta de empleo y oportunidades deciden salir de su hogar.
Quirino, de 56 años de edad, originario de la comunidad del Naranjal, migró a Colima para trabajar en una plantación como jornalero agrícola.
Nos cuenta que desde la última vez que regresó a su comunidad no ha vuelto a ir a dicho lugar debido a la pandemia de COVID-19.
Señala que durante su tiempo en Colima, él y sus compañeros sufrieron faltas de respeto por parte de los jefes del cultivo, quienes incumplían los acuerdos laborales y no daban comida suficiente a los trabajadores.
Uno de los problemas que tienen los jornaleros es que la comida que consumen es cargada a su cuenta. Esto reduce su salario final casi a la mitad.
Además, los contratistas liquidan el salario completo a los trabajadores después de su contrato de dos meses.
A continuación escuchamos el testimonio de don Quirino.